Las autoridades de Estados Unidos y las Filipinas informaron que pueden extender sus ejercicios militares conjuntos, destinados a poner fin a las bandas de secuestradores en las islas del sur de las Filipinas.
Tras reunirse este domingo con la presidenta Gloria Arroyo y otros influyentes funcionarios, el sub secretario de Defensa estadounidense, Paul Wolfowitz, dijo que Washington considera mantener soldados en las Filipinas después que finalice su actual misión de entrenamiento a fin del mes próximo.
La presidenta Arroyo dijo que los soldados estadounidenses deben extender sus gestiones de entrenamiento a nivel táctico, trabajando con las fuerzas filipinas a nivel de invitados. Esto aumentaría las posibilidades de que las fuerzas estadounidenses encuentren combatientes rebeldes, pero las autoridades dijeron que las tropas estadounidenses no estarán involucradas en operaciones de combate.