La cantidad de muertos a consecuencia de las inundaciones en el sur de Rusia se elevó a 59, mientras funcionarios gubernamentales realizan una evaluación de los daños en ciudades y provincias en toda la región.
Más de 85 mil personas quedaron sin hogar desde que comenzaron las lluvias, hace una semana.
Rescatistas continúan evacuando habitantes del lugar y participan de las operaciones de rescate. El ministro de situaciones de emergencia de Rusia, Sergei Shoigu, se trasladará a Dagestán, hoy, una de las repúblicas más afectadas.
El gobierno federal ha enviado aviones cargados de suministros humanitarios a la región.