Una comisión de científicos estadounidenses dijo que la mayoría de los norteamericanos no deberían ser vacunados contra la viruela, a menos que puedan permanecer bajo supervisión médica luego de la inoculación.
En un informe emitido este martes, el Instituto de Medicina, una organización privada que asesora al gobierno, destacó los riesgos potenciales de la vacuna, tanto para quienes la reciban como para quienes estén en estrecho contacto con ellos.
El informe enfatizó que el riesgo de un ataque biológico usando viruela es sólo teórico, en tanto que la vacuna porta mayores riesgos que otras inoculaciones.
Actualmente, el gobierno de Estados Unidos requiere que aproximadamente medio millón de integrantes del personal militar reciba la vacuna contra la viruela.
La Admninistración Bush está tratando también de inmunizar voluntariamente a varios millones de personas que integran el personal médico y de emergencia, ya que se trata de personas que podrían estar inmediatamente expuestas a la viruela en caso de un brote epidémico.
Sin embargo, menos de 40 mil empleados hasta ahora se han presentado voluntariamente para recibir la vacuna.
La viruela se declaró erradicada en 1979, pero el gobierno estadounidense cree que algunos grupos pueden haber desarrollado el virus para usarlo como arma biológica.