Un avión de carga del United Parcel Service, más conocido por sus siglas, UPS, fue obligado a hacer un aterrizaje de emergencia después que la compañía estadounidense recibió una llamada telefónica avisando que había una bomba a bordo del vuelo.
Un portavoz de la empresa dijo que la aeronave iba en ruta de Los Ángeles, California, a Louisville, Kentucky, cuando funcionarios de UPS recibieron el aviso por teléfono.
En consecuencia, el apratao fue desviado a Phoenix, Arizona, donde aterrizó sin problemas en el aeropuerto internacional de esa ciudad.
El avión fue inmediatamente registrado por una unidad policial