El gobierno nacional de Argentina recomendó que el próximo viernes las provincias implementen un feriado sanitario en la administración pública para frenar el avance de la gripe A H1N1, que ya causó 70 muertes y ha infectado a 100.000 personas en el país.
La medida no es obligatoria, sino que cada jurisdicción debe decidir si implementarla o no.
Algunas de las provincias que se adhirieron a la medida fueron Chubut, Salta, Jujuy, Córdoba y Santa Fe, Mendoza, La Pampa y Tucumán, informó el periódico La Nación.
Los bancos privados también decidieron no abrir hasta el lunes.
La decisión fue comunicada a través de la Asociación de Bancos de la Argentina (ABA), según informó Clarín.
Sin embargo, la recomendación del feriado sanitario no vino sin controversias. El gobierno de la ciudad de Buenos Aires, por ejemplo, decretó que no está de acuerdo con el asueto y no se sumará a la medida.
"Desde el punto de vista epidemiológico, nosotros no estamos de acuerdo con el asueto", dijo el ministro de salud porteño, Jorge Lemus, quien además encabeza el Comité de Expertos que monitorea la gripe A en el distrito.
A su vez, el secretario de gobierno porteño, Marcos Peña, dijo a Radio 10 que el asueto no tiene un efecto sanitario y hasta es “discriminatorio” ya que sólo se aplica al sector público.
Peña también criticó que el gobierno nacional tomara la decisión sin consultar a otros expertos y autoridades de Salud.
“Ellos nunca lo propusieron ni se habló en Cofesa (Consejo Federal de Salud). Esta medida no se discutió. Ni en Cofesa ni en la Comisión”, aseguró en declaraciones a la radio.
Por otra parte, el Ministerio de Salud de la Nación publicó en su portada que Mirta Roses Periago, titular de la oficina regional de la Organización Mundial de la Salud, calificó como “acertadas las medidas dispuestas por el ministro de Salud Juan Manzur”.
“También comprometió reforzar la asistencia del organismo a la Argentina a través de apoyo técnico y recursos humanos”, según el comunicado.