Los socios comerciales de Cuba, como Francia, Italia, Japón, España y Rusia, han ofrecido a la nación caribeña regularizar miles de millones de dólares para condonar su deuda mediante el intercambio y la refinanciación, en anticipo a la llegada a compañías estadounidenses.
Los acreedores de La Habana intentan convencer a Cuba para que firme contratos con sus empresas para actualizar la infraestructura de la isla a cambio de cancelar la deuda.
En diciembre, el Club de París (un grupo de naciones acreedoras) perdonó 8.500 millones de los 11.100 millones de dólares en deuda incumplida de Cuba. Desde entonces el gobierno cubano ha firmado acuerdos bilaterales de seguimiento con la mayoría de sus miembros.
España y Francia han prometido más de 700 millones de dólares de la deuda pendiente de Cuba para proyectos de desarrollo local y se espera que Italia y Japón sigan su ejemplo este mes.
Cuba está buscando la inversión en obras hidráulicas, ferrocarriles, puertos, energía renovable y nuevos complejos turísticos.