El condenado a muerte en Alabama, Kenneth Smith, fue ejecutado el jueves por la noche mediante hipoxia de nitrógeno. Se trata de la primera ejecución con este método en Estados Unidos.
Las últimas palabras de Smith fueron: "Esta noche, Alabama hizo que la humanidad diera un paso atrás". Y sufriendo mucho, según su asesor espiritual, Jeff Hood.
"Lo que vimos fueron minutos de alguien luchando por su vida. Lo vimos jadeando y moviéndose de un lado a otro. Vimos todo tipo de cosas salir de su boca, aún con la máscara puesta.”
Smith fue declarado muerto casi media hora después del comienzo del procedimiento. El gas fluyó durante 15 minutos. Según periodistas presentes, Smith se retorció por dos minutos antes de sucumbir a la sofocación, después de varios minutos.
El gobierno estatal dijo previamente que el nitrógeno habría hecho que Smith perdiera el conocimiento en segundos y muriera en minutos. Después de la ejecución, afirmó que todo transcurrió como se esperaba.
John Hamm, Comisionado penitenciario de Alabama, explicó:
“Parece que Kenneth Smith trató de contener la respiración tanto como fuera posible. También luchó un poco contra las ataduras, pero hubo algunos movimientos involuntarios y algo de respiración agónica.”
La Corte Suprema, en la noche del jueves, autorizó el procedimiento, a pesar de una apelación final de Smith.
Ahora Alabama ha sido blanco de una fuerte condena por esta ejecución, incluso por parte de Naciones Unidas, que la definió como inaceptable.
Ravina Shamdasani, Vocera de la Oficina de Derechos Humanos dijo:
“Podría equivaler a tortura, trato inhumano y degradante, en violación de los tratados de Derechos Humanos que Estados Unidos ha firmado”.
Alabama, no obstante, reiteró que continuará utilizando el gas nitrógeno en futuras ejecuciones, mientras otros estados podrían explorar el uso de este nuevo método. Oklahoma y Mississippi ya dieron la luz verde, pero aún no lo implementaron.
Estados Unidos es el único país en las Américas donde aún existe la pena de muerte.