Un 40 por ciento de alemanes quiere que la canciller Angela Merkel renuncie debido a su política sobre refugiados, reveló una nueva encuesta el viernes.
El sondeo muestra la creciente insatisfacción hacia la posición de puertas abiertas de Merkel para la gente que huye del conflicto y las dificultades económicas en el Medio Oriente y África.
La popularidad de la canciller alemana ha venido decreciendo de los máximos alcanzados el año pasado, y ahora incluso miembros de su propia coalición conservadora la han presionado para que adopte una política más estricta frente a los buscadores de asilo.
El jueves, en respuesta a la presión popular, los conservadores de Merkel y sus socios de coalición, los izquierdistas social-demócratas acordaron restringir las reglas de asilo para contener el flujo de migrantes.
Los socios europeos de Alemania también han expresado desacuerdo con la posición de Merkel, entre ellos el primer ministro italiano Matteo Renzi, con quien la canciller alemana se reunirá este viernes.
La ola migratoria sin precedentes ha llevado a anuncios como el de Suecia, el jueves, que anunció que tendría que deportar a unos 60.000 a 80.000 migrantes en los próximos años debido al alto número de personas que buscan asilo y el costo que implica recibirlos.