Tras el fallo de la corte de EE.UU. que ordenó a Argentina a pagar su deuda, el gobierno argentino expresó que apelará la decisión, mientras la presidente Cristina Fernández insiste en que su país "no pagará ni un dólar".
La decisión fue confirmada por el ministro de Economía de Argentina, Hernán Lorenzino, quien prometió pelear contra lo que llamó un "colonialismo judicial".
El jueves un juez de una corte de Nueva York dictaminó que Argentina deberá pagar los 1.300 millones de dólares que debe a los acreedores que decidieron no entrar a lo canjes de bonos adeudados y que llevaron a la incautación de una fragata argentina "libertad" en Ghana.
La jueza federal de distrito, Thomas Griesa estipuló en su fallo que la fecha límite para cumplir con el pago de la deuda vence este 15 de diciembre y de no pagar el Banco de Nueva York, el cual procesa los pagos de los bonos argentinos a los otros acreedores, deberá retener dichos pagos.
De esta manera Argentina podría enfrentar otro impago histórico de la deuda soberana Argentina, esta vez por un total de 20.000 millones de dólares.
Este fallo de la corte se produce en medio de la peor crisis que enfrenta Argentina donde hace unos días se produjo un paro nacional que paralizó las principales ciudades. Los representantes argentinos reclaman un aumento de salario mínimo y el no pago del impuesto a las ganancias.
La presidenta Cristina Fernández ha reiterado en diferentes oportunidades que no cederá a las presiones para pagar la deuda la que ha denominado "fondos buitres".
La prensa internacional ha considerado el fallo estadounidense de "ejemplificador" y la jueza expresó que la continua negativa de Fernández para cumplir con su obligación financiera ha sido considerada una "desafío" para la justicia estadounidense.
De igual manera se informó que los países que interfieran para ayudar a Argentina podrían enfrentar un juicio.
La decisión fue confirmada por el ministro de Economía de Argentina, Hernán Lorenzino, quien prometió pelear contra lo que llamó un "colonialismo judicial".
El jueves un juez de una corte de Nueva York dictaminó que Argentina deberá pagar los 1.300 millones de dólares que debe a los acreedores que decidieron no entrar a lo canjes de bonos adeudados y que llevaron a la incautación de una fragata argentina "libertad" en Ghana.
La jueza federal de distrito, Thomas Griesa estipuló en su fallo que la fecha límite para cumplir con el pago de la deuda vence este 15 de diciembre y de no pagar el Banco de Nueva York, el cual procesa los pagos de los bonos argentinos a los otros acreedores, deberá retener dichos pagos.
De esta manera Argentina podría enfrentar otro impago histórico de la deuda soberana Argentina, esta vez por un total de 20.000 millones de dólares.
Este fallo de la corte se produce en medio de la peor crisis que enfrenta Argentina donde hace unos días se produjo un paro nacional que paralizó las principales ciudades. Los representantes argentinos reclaman un aumento de salario mínimo y el no pago del impuesto a las ganancias.
La presidenta Cristina Fernández ha reiterado en diferentes oportunidades que no cederá a las presiones para pagar la deuda la que ha denominado "fondos buitres".
La prensa internacional ha considerado el fallo estadounidense de "ejemplificador" y la jueza expresó que la continua negativa de Fernández para cumplir con su obligación financiera ha sido considerada una "desafío" para la justicia estadounidense.
De igual manera se informó que los países que interfieran para ayudar a Argentina podrían enfrentar un juicio.