Bolivia reabre vuelos internacionales y reanuda actividades

Pasajeros y trabajadores en el Aeropuerto El Alto en La Paz, Bolivia, usan mascarillas tras el brote de coronavirus el 11 de febrero de 2020. [Archivo]

Bolivia reanudó el martes los vuelos comerciales internacionales, amplió la jornada laboral y gran parte de las actividades suspendidas hace cinco meses debido a la pandemia del nuevo coronavirus pese a que los contagios siguen altos, anunciaron las autoridades.

Los vuelos de pasajeros y de carga a Estados Unidos y España ya están operativos y en los siguientes días se sumarán Brasil, Argentina, Colombia, Chile y otros países que vayan abriendo sus fronteras aéreas, dijo el ministro de Transportes y Obras Públicas, Iván Arias. Durante este tiempo solamente hubo vuelo humanitarios autorizados.

Los pasajeros deben presentar una prueba negativa de COVID-19 “de no más de siete días” de antigüedad antes de embarcar. No se exigirán 14 días de cuarentena a los pasajeros que arriben al país, precisó Arias.

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Los viajes terrestres, incluidos a países vecinos, se irán normalizando con medidas de bioseguridad. El gobierno de la presidenta interina Jeanine Áñez clausuró el año escolar a principios de agosto debido a la imposibilidad de garantizar una educación universal y gratuita a todos ya que el acceso a internet es escaso en las áreas rurales.

No obstante y ante las críticas, el ministro de Educación Víctor Hugo Cárdenas anunció la víspera que las clases virtuales serán reanudadas. Las universidades públicas y privadas mantienen sus puertas abiertas con clases a distancia. Las actividades de entretenimiento masivas también seguirán suspendidas.

Hasta el martes Bolivia ha reportado 116.598 positivos y 5.027 decesos.

La pandemia tampoco frenó la campaña electoral para las cruciales elecciones presidenciales del 18 de octubre. Los comicios de octubre del año pasado fueron anulados por supuesto fraude y hundieron al país en el caos y la violencia con 36 muertes que obligaron al entonces presidente Evo Morales a dimitir y asilarse tras 14 años en el poder.