La subsecretaria para Cuba y Venezuela del Departamento de Estado de EE.UU., Carrie Filipetti, explicó que las nuevas sanciones anunciadas este miércoles por Washington contra el gobierno de Cuba buscan evitar que los beneficios que genera el turismo en la isla caigan en manos de autoridades, en vez de que vayan a parar al pueblo cubano.
El Departamento del Tesoro impuso nuevas restricciones para viajeros estadounidenses, que incluyen a unos 433 hoteles y complejos turísticos en una lista de alojamientos prohibidos en Cuba, además de más limitaciones a las importaciones de alcohol y tabaco producido y comercializado dentro de la isla.
¿Cuál es el objetivo?
Filipetti calificó la medida como una “acción muy significativa en la política para apoyar al pueblo cubano”.
“Queremos que las personas que están considerando viajar a Cuba o están considerando comprar algún producto en la isla estén al tanto de que su dinero está financiando la represión mientras va a un privilegiado rico del régimen, quien no cree que los cubanos deban tener una voz en su país”, sostuvo.
La funcionaria aseguró que, a pesar de las restricciones, todavía hay opciones para viajar y alojarse en la isla, como es el caso de los emprendedores independientes cubanos que cuentan con alojamientos privados conocidos como “casas particulares”.
“Las arbitrarias y caprichosas políticas del régimen evitan que estos emprendedores cubanos logren su máximo potencial”, argumentó.
Ninguna de estas “casas particulares” independientes fue incluida en la lista, explicó Filipetti.
También lea EE.UU. impone nuevas sanciones a Cuba para presionar al gobiernoEl secretario de Estado, Mike Pompeo, indicó en un comunicado emitido horas antes que estas medidas “están orientadas a privar al régimen cubano de los recursos que utiliza para oprimir a la población cubana y financiar su injerencia en Venezuela”.
¿Por qué ahora?
Filipetti explicó que la administración del presidente Donald Trump se ha enfocado en "golpear las principales fuentes de ingreso” del gobierno cubano, liderado por Miguel Díaz-Canel, y sostuvo que el turismo está en las tres principales.
Además, agregó, al impulsar el uso de las "casas particulares" también esperan mejorar las condiciones en la isla y de sus ciudadanos.
Al ser cuestionada sobre el por qué informar de las sanciones en este momento político del país, con las elecciones presidenciales a escasas semanas, la funcionaria aseguró que la medida no tiene ningún nexo con asuntos nacionales.
“Ha estado en proceso por bastante tiempo”, apuntó, añadiendo que estas acciones llevan un número de aprobaciones distintas y un tiempo para verificar correctamente las entidades señaladas.
En el comunicado mencionado anteriormente, Pompeo aseguró que EE.UU. “seguirá apoyando al pueblo cubano en su aspiración de lograr un gobierno democrático, prosperidad económica y respeto de los derechos humanos”.
Las reacciones del gobierno cubano no se hicieron esperar. El presidente Díaz-Canel aseguró que las nuevas medidas “violan los derechos de los cubanos y también de los norteamericanos”.
“Su cruel, y criminal política será derrotada por nuestro pueblo que no renunciará nunca a su soberanía”, agregó en su publicación de Twitter.
¿Existen otras restricciones?
Además del turismo y la venta de alcohol y tabaco, las sanciones anunciadas este miércoles también restringen la asistencia a encuentros y conferencias profesionales, actuaciones públicas, competencias deportivas y otros eventos.
Al eliminarse la autorización general, en estos casos deberán solicitarse licencias específicas que serán analizadas caso por caso.
La única licencia que queda para eventos deportivos son las otorgadas para competencias deportivas de atletas o equipos atléticos amateur o semiprofesionales.