El exdirector de la petrolera estatal mexicana Pemex, Emilio Lozoya, actualmente bajo proceso judicial, acusó a expresidentes y políticos principalmente del opositor PAN, de participar en distintos hechos de corrupción, en una declaración ante la fiscalía que obtuvo la prensa.
En su declaración por escrito, filtrada el miércoles por la noche a la prensa, Lozoya dijo que por supuestas instrucciones del expresidente Enrique Peña Nieto y el exsecretario de Hacienda y excanciller, Luis Videgaray, entregó sobornos a legisladores para que aprobaran reformas estructurales.
Entre ellas, la reforma energética, que abrió el sector a la iniciativa privada tras 71 años de monopolio estatal.
“Enrique Peña Nieto y Luis Videgaray me indicaron en febrero del 2013, que se requería entregar montos importantes de dinero a la oposición para que ésta votara a favor de ciertas reformas estructurales”, dice Lozoya en el documento.
El exfuncionario dijo también que los entonces senadores del Partido Acción Nacional (PAN derecha) Francisco García Cabeza de Vaca y Francisco Domínguez -hoy gobernadores de los estados de Tamaulipas (noreste) y Querétaro (centro), respectivamente- habrían recibido sobornos. Ambos, sin embargo, han negado las acusaciones.
Videgaray rechazó las imputaciones de Lozoya en un comunicado en su cuenta de Twitter y se dijo dispuesto a “atender el llamado de la autoridad competente” y a “contribuir así al esclarecimiento de la verdad”.
“No sorprende que Lozoya intente ahora culpar a otros para salvarse (…) es ampliamente sabido que tuvimos una mala relación personal, resultado de su mal manejo financiero de Pemex, de lo que él pretendía hacer con la Reforma Energética”, señala el comunicado.
También lea Exdirector de Pemex podría destapar más corrupción en la política mexicanaDomínguez, quien estuvo presente el miércoles durante la habitual conferencia de prensa del presidente Andrés Manuel López Obrador, negó las acusaciones de corrupción.
“El señor Lozoya ha pretendido involucrarme con una bajeza inaudita en actos de corrupción (…). No había necesidad de darme dinero para obtener un voto que ya se tenía por convicción personal”, dijo Domínguez.
Lozoya señala en su declaración que también habría entregado poco más de seis millones de pesos (unos 300.000 dólares) al excandidato presidencial del PAN Ricardo Anaya, quien también negó la acusación.
“Que no sueñen con que me voy a dejar. Conmigo se van a topar con pared. No me importa cuánto tiempo me tome”, dijo Anaya en un video subido a redes sociales. El político compitió con López Obrador durante la elección de 2018 y previamente fue diputado federal.
Lozoya dijo que durante el gobierno de Felipe Calderón (2006-2012) se habrían dado condiciones ventajosas a la empresa Braskem, filial de la constructora brasileña Odebrecht, para la construcción de una planta petroquímica.
En respuesta, Calderón dijo en Twitter que Lozoya es utilizado por López Obrador “como instrumento de venganza y persecución política”.
Lozoya dijo también que el expresidente Carlos Salinas (1988-1994) habría cabildeado para que uno de sus hijos recibiera proyectos de Pemex.
Denuncia “cierta”
La fiscalía general rechazó haber filtrado el documento, pero no negó su autenticidad.
De su lado, el presidente López Obrador dijo que la denuncia es auténtica.
“Ya tengo conocimiento de la denuncia que presuntamente presentó el señor Lozoya, todo indica que es cierta, efectiva, que no es apócrifa, que es la denuncia que en efecto presentó a la procuraduría”, dijo el mandatario en su conferencia de este jueves.
López Obrador dijo, sin embargo, que si los políticos señalados consideran que están siendo difamados, “presenten denuncias por daño moral”.
El presidente ya había pedido antes que se conocieran todos los detalles de la acusación de Lozoya.
El martes difundió en su conferencia de prensa diaria un video de origen desconocido y previamente difundido en redes sociales en el que aparecen dos exfuncionarios del Senado con maletas de dinero, que se presume serían los sobornos que se pagaron según Lozoya.
El exfuncionario, de 45 años y quien dirigió Pemex entre 2012 y 2016, fue extraditado desde España el pasado 17 de julio para ser procesado por uso de recursos de procedencia ilícita, asociación delictuosa y cohecho.