El presidente Andrés Manuel López Obrador ordenó el envío de una nota diplomática al gobierno de Estados Unidos para solicitarle información del operativo Rápido y Furioso, iniciado en el 2009, a través del cual se introdujeron armas a México que a la postre usaron los narcos.
La solicitud tiene como fin aclarar si el expresidente Felipe Calderón estuvo enterado del dispositivo, luego de que éste rechazara en su cuenta de Twiter que su administración haya tenido un acuerdo con el gobierno de Estados Unidos para introducir armas a territorio nacional.
Calderón aseguró que fue una operación secreta cuya implementación y resultados fueron revelados a México hasta que se hicieron públicas sus consecuencias negativas.
El presidente López Obrador dijo que el tema es muy delicado para México y, en su caso, aún es tiempo de que el vecino país ofrezca disculpas. Indicó: "que el mismo gobierno estadounidense diga si hubo o no cooperación, nada más como complemento; y si no hubo cooperación, que de todas maneras era indebida e ilegal”.
El mandatario recordó que era otro el presidente en México, pero estimó que “al final de cuentas es el gobierno de Estados Unidos que tiene que explicar esta situación, como nosotros tendríamos que hacerlo si hubiésemos hecho algo parecido en Estados Unidos o con cualquier país. Esto es parte del derecho internacional”.
El tema requiere investigación y claridad
López Obrador aclaró que no es que ponga en duda la respuesta del expresidente Calderon, sino que el tema requiere de una investigación y claridad, porque en ello se violó la soberanía del país.
El mandatario explicó: “Lo que me parece grave es que se haya llevado a cabo una intervención violatoria de nuestra Constitución, de nuestra soberanía, un operativo secreto y que se haya causado la muerte con esas armas a mexicanos y, como ya lo dije, a un extranjero. ¿Cómo hacer eso? ¿Un gobierno que invade de esa manera, que viola flagrantemente la soberanía, las leyes internacionales y nos quedamos callados? Esto lo tenemos que ver no sólo a partir de lo que sucedió o pensando en aquél tiempo, lo tenemos que ventilar para que nunca jamás se vuelva a llevar a cabo una acción de este tipo”.
Andrés Manuel López Obrador calificó este asunto de muy grave, pues esas armas se usaron para cometer homicidios en México e incluso con una de esas armas se le quitó la vida a un funcionario estadounidense.