La cantante Ariana Grande demandó a la cadena de ropa Forever 21 por 10 millones de dólares, acusandolos de usar su fama e influencia para vender sus productos.
En una demanda presentada el lunes, Grande acusó a Forever 21 y a la firma de belleza Riley Rose de apropiarse indebidamente de su nombre, imagen y música, incluso mediante el empleo de una modelo “sorprendentemente similar” en un sitio web y en una campaña en redes sociales a principios de este año.
Grande dijo que esto sucedió luego que fracasaran las conversaciones para crear una campaña de marketing el pasado mes de febrero, debido a que Forever 21 no le pagaría lo suficiente.
La estrella tiene más de 65 millones de seguidores en Twitter y 163 millones en Instagram. Una parte central de la base de seguidores de la cantante de 26 años coincide con los clientes potenciales de la marca.
Según la demanda de Grande, Forever 21 y Riley Rose se apropiaron indebidamente de al menos 30 imágenes y videos, incluso utilizando el audio y las letras de su reciente sencillo “7 Rings” y presentando a una modelo muy parecida a ella.
La demanda, presentada en una corte federal de Los Ángeles, California, busca compensación de daños por infringir derechos de autor y marca registrada, falso respaldo y por violar su derecho a la publicidad.