Oficiales estadounidenses están tomando medidas por lo que parece ser una operación de tráfico de personas presuntamente involucrando marines en el sureste de California.
Funcionarios, incluyendo aquellos en el Servicio de Investigación Criminal Naval (o NCIS, por sus siglas en inglés), arrestaron a 16 marines el jueves temprano después de que ellos, y cientos de otros marines, fueron convocados a una formación de batallón en Camp Pendleton, ubicado aproximadamente a 79 kilómetros al norte de San Diego.
También lea Senado de EE.UU. confirma al exmilitar Esper como secretario de DefensaSegún el cuerpo de marines, los arrestos se derivaron de una investigación previa de tráfico de personas que resultó en dos arrestos.
En ese caso, el marine Byron Law II y el marine David Salazar-Quintero fueron arrestados el 3 de julio después de que agentes de la Patrulla Fronteriza los encontró recogiendo a tres extranjeros sin papeles legales en la interestatal 8, según una queja presentada ante el Tribunal para el Distrito Sur de California.
La queja decía que los dos marines han estado en contacto con un reclutador, quien ofreció pagarles por recoger y transportar a los inmigrantes desde la interestatal a otras locaciones.
Law detalló que a él y Salazar-Quintero nunca les pagaron por la interacción, según la queja.
Los marines y funcionarios de NCIS afirmaron que información adicional no será publicado por la investigación está en curso.
“Ninguno de los marines arrestados o detenidos para ser interrogados sirvieron de ayuda de la misión de Apoyo de la Frontera del Sudoeste", dijo el cuerpo de marines en una declaración.
Los cargos aún no se han presentado en relación con los últimos arrestos.
El cuerpo de marines detalló que otros ocho marines fueron interrogados en denuncias por drogas no relacionadas.
Los arrestos de este jueves se dan un día después de que el Comando de Operaciones Especiales de EE.UU. anunció los SEAL de la marina en Irak regresaron a EE.UU. antes de tiempo debido al "deterioro percibido del buen orden y disciplina"
Según los reportes de medios, alrededor de 20 de los SEALs estuvieron bajo investigación por beber o estar al tanto de la bebida mientras no estaba de servicio.
Beber alcohol está prohibido durante cualquier despliegue de combate en el Medio Oriente.