El nominado del presidente Bush para dirigir la Agencia Central de Inteligencia defendió el programa de interferencia de comunicaciones internas como legal y necesario para luchar contra el terrorismo.
Durante su audiencia de confirmación en la Comisión de Inteligencia del Senado, el general de la Fuerza Aérea, Michael Hayden, dijo este jueves que ayudó a formular el programa cuando dirigía la Agencia de Seguridad Nacional. Añadió que varios abogados del gobierno le ratificaron la legalidad del mismo.
Señaló que el programa de vigilancia es necesario para seguirle la pista a los terroristas, y que el gobierno trabaja para equilibrar privacidad y seguridad, y opera dentro de la ley. El programa de la NSA, como se conoce a la agencia por sus siglas en inglés, involucra la escucha de llamadas internacionales hacia o desde Estados Unidos realizadas por personas que se sospecha tiene vínculos con el terrorismo. El programa no cumple una ley que obliga al gobierno a solicitar una orden de una corte especial para llevar a cabo dicho monitoreo.
El general Hayden declinó comentar públicamente la información reciente de un periódico que alega que el gobierno ha estado colectando récordes de millones de estadounidenses.