El presidente Bush aprobó una reforma a la ley de jubilación que exhorta a las compañías privadas a mejorar sus planes de beneficios y reservar los fondos necesarios.
El mandatario firmó la legislación este jueves calificándola como la reforma más amplia a las leyes de retiro en más de 30 años.
Señaló que los cambios incluyen medidas más estrictas para que las empresas hagan contribuciones a sus planes de pensión tal como lo prometieron.
Bush dijo que se necesita preparar más reformas para el gran número de trabajadores de la llamada generación de post guerra que se anticipa se jubilará en los próximos años.
Prometió además trabajar con el Congreso federal para fortalecer el sistema de jubilaciones de la nación.