Representantes de más de 40 países están reunidos en la capital noruega, Oslo, hoy, jueves, en un esfuerzo por prohibir las bombas de racimo.
Noruega ha dijo que confía en iniciar un movimiento mundial contra las bombas de racimo, similar a la prohibición de minas antipersonal negociada en Oslo, en 1997.
El gobierno noruego organizó la reunión de Oslo, entre gobiernos y activistas, después que conversaciones en Ginebra, en noviembre, no avanzaron hacia la prohibición de las armas.
Una bomba de racimo consiste en un recipiente que contiene varios explosivos más pequeños llamados submuniciones.
El artefacto estalla en medio del aire y disemina las submuniciones en una extensa área.
Estados Unidos, Rusia y China están entre los países que se oponen a la prohibición.
Ellos dicen que el uso de las bombas de racimo ya está incluído en una Convención de las Naciones Unidas, de 1980, sobre Armas Convencionales.