El presidente Bush dijo que sabe que el pueblo estadounidense está cansado de la guerra en Iraq, pero señaló que una retirada prematura de tropas es una estrategia peligrosa para la seguridad de Estados Unidos.
El mandatario habló este miércoles a soldados norteamericanos y sus familiares en la base de entrenamiento militar Fort Irwin, en el estado de California.
Dijo que es una estrategia que estimula al enemigo a esperar que se vayan las tropas estadounidenses y dejen la zona vulnerable a cualquier ataque.
Prometió de nuevo que esa estrategia no se convertiría en ley.
Tanto el senado como la Cámara de Representantes aprobaron versiones de un proyecto de ley para financiar al ejército, pero incluyendo un cronograma para una retirada de tropas de Iraq.
Bush dejó claro que ambas legislaciones son inaceptables y destacó que el Congreso no debe decir a los generales cómo hacer su trabajo.