El gobierno de Bush anunció que redujo las exigencias de pasaporte para los viajeros de Estados Unidos en el Hemisferio Occidental durante los próximos tres meses.
El gobierno informó hoy, viernes, que suspenderá la exigencia de que todos los ciudadanos estadounidenses tengan un pasaporte válido para viajar por aire hacia y desde Canadá, México, el Caribe y Bermudas.
Aún así, los viajeros tendrán que demostrar que han solicitado el pasaporte.
La propuesta surgió como reacción a la creciente acumulación de solicitudes de pasaportes estadounidenses desde enero, cuando entraron en vigencia las leyes que exigían pasaporte para las naciones mencionadas.
La medida, conocida como la Iniciativa de Viajes para el Hemisferio Occidental generó un aumento de las solicitudes de pasaporte en el Departamento de Estado, causando acumulaciones y retrasos que han derivado en quejas de indignados postulantes a sus representantes en el Congreso.