Dos nuevos informes conocidos este miércoles constituyen nueva evidencia de que la economía de Estados Unidos está perdiendo fuerza.
Un informe del Departamento de Comercio indica que la venta de casas recién construidas cayó, en febrero, al nivel más bajo de los últimos 13 años.
Y los precios de esas viviendas declinaron cerca del 3% en relación a la misma fecha del año anterior.
Los economistas sostienen que el deterioro del sector vivienda es la principal razón de la desaceleración de toda la actividad económica.
Mientras tanto, una medida clave de la actividad futura en el sector manufacturero estadounidense cayó por segundo mes consecutivo en febrero.
El informe divulgado este miércoles por el Departamento de Comercio muestra que los pedidos de bienes durables -artículos de tres años o más de duración- descendió en 1,7%.
La debilitada economía ha desalentado los pedidos de manufacturas, afectando negativamente las inversiones en nuevos equipos.