El presidente de Colombia, Álvaro Uribe, dijo que no se arrepiente de ordenar la incursión fronteriza contra un campamento rebelde en Ecuador, a pesar de las muertes de cuatro estudiantes mexicanos, en el ataque.
Uribe hizo las declaraciones a la televisión mexicana, el miércoles, mientras estaba en el país para asistir a un foro económico internacional.
El mandatario dijo que la incursión fue necesaria porque los insurgentes habían lanzado explosivos al otro lado de la frontera, lo que provocó la muerte de soldados colombianos.
Uribe también afirmó que los estudiantes mexicanos estaban colaborando con los rebeldes.
El presidente mexicano, Felipe Calderón, posteriormente pidió a su colega colombiano que no llamara a las estudiantes “colaboradores” hasta que no se complete una exhaustiva investigación.
El ataque colombiano en territorio ecuatoriano, el 1 de marzo, provocó la muerte de 25 personas, incluyendo los estudiantes y un alto dirigente de las FARC, el mayor grupo guerrillero de Colombia.