Un equipo de científicos estadounidenses informa que dos monos, a los que se les implantaron pequeños sensores en el cerebro, aprendieron a controlar un brazo robótico con el pensamiento.
El aparato podría eventualmente ayudar a las personas cuyas habilidades motoras han sido limitadas, debido a parálisis o enfermedades.
Los investigadores de la Universidad de Pittsburg implantaron diminutos sensores electrónicos en el cerebro de dos monos, los cuales detectan las señales dadas por la corteza motora de los animales.
Los sensores envían las señales a una computadora, la cual a su vez las transmite a un brazo mecánico atado al costado de los monos.
Los investigadores indican que los simios pudieron utilizar el brazo con una precisión “casi humana” para alimentarse con bocadillos.
El informe de la investigación es publicado en la revista científica estadounidense “Nature”.