Un familiar dice que dos ancianas chinas que solicitaron hacer una protesta durante los Juegos Olímpicos han recibido órdenes de pasar un año en un campo de trabajos forzados.
El hijo de una de las dos mujeres, Wu Dianyuan, dijo, el miércoles, que su madre, de 79 años, y Wang Xiujing, de 77, han sido sentenciadas a un año de re-educación a través del trabajo.
Las mujeres fueron forzadas a salir de sus hogares, en Beijing, en 2001.
Solicitaron repetidamente para protestar por sus desalojos, en una de las tres zonas de protesta oficial de las Olimpíadas de China.
El gobierno chino dijo que crearía zonas para que los manifestantes usaran durante los juegos.
Se presentaron unas 77 solicitudes, pero las autoridades dicen que ninguna fue aprobada.
Grupos defensores de los derechos dicen que las zonas fueron sólo una manera del gobierno chino para aparentar que cumplían con los estándares internacionales relativos a los derechos humanos.