El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, dijo que piensa que hay una posibilidad de que hubiera una bomba a bordo del avión ruso que estalló en Egipto.
Obama hizo la declaración en una entrevista con la radio KIRO de Seattle indicando que "Pienso que hay una posibilidad de que hubiera una bomba a bordo y estamos tomando eso muy seriamente".
No obstante, funcionarios de Estados Unidos y Gran Bretaña hablan de una “alta posibilidad” de que una bomba haya hecho caer el avión ruso sobre la Península del Sinaí en Egipto, la semana pasada.
Un alto funcionario estadounidense dijo a algunos medios que las comunicaciones interceptadas apuntan a la posibilidad de que el grupo Estado islámico sea responsable del atentado en el que murieron 224 personas.
El secretario de Asuntos Exteriores de Gran Bretaña, Philip Hammond, dijo que “existe una significativa posibilidad que la caída del avión fue causada por un artefacto explosivo a bordo de la aeronave”.
Los expertos están examinando los restos del avión buscando señales de terrorismo, mientras algunos reportes dicen que los exámenes forenses han revelado metralla en los cuerpos de algunas de las víctimas. Los expertos también examinan las cajas negras del avión.
El grupo Estado islámico ha reclamado en dos ocasiones responsabilidad por el atentado, pero hasta ahora no ha presentado ninguna evidencia en firme que respalde tal afirmación.
El presidente egipcio, Abdel Fattah el-Sissi, ha desestimado las afirmaciones de ISIS como “propaganda” que busca dañar la seguridad y estabilidad en Egipto y dijo que las conclusiones estadounidenses y británicas son prematuras.
El-Sissi se encuentra en Londres para reunirse este jueves con el primer ministro británico, David Cameron.
Londres suspendió todos los vuelos entrantes y salientes desde Egipto como medida de precaución, pese a que se estima hay unos 20.000 turistas, la mayor parte británicos, en Sharm el-Sheik, el balneario de donde partió el avión ruso de Metrojet.
David Schenker, un experto en el Medio Oriente que trabaja para el Instituto para las Políticas del Cercano Oriente dijo a la Voz de América que “no sería una sorpresa” si el grupo Estado islámico está detrás del atentado.
Schenker dijo que el grupo extremista tiene interés en atacar tanto a Egipto como a Rusia, y que hacer volar un blanco suave como un avión de pasajeros enviaría una poderosa señal sobre su lucha.