La producción azucarera de Cuba de este año se ubicará entre 1 millón 300 mil y 1 millón 400 mil toneladas, lo que apenas dejará unas 200 o 300 mil toneladas disponibles para la exportación, reconocieron los analistas del sector. De esta forma Cuba no conseguirá aprovechar la oportunidad de capitalizar la suba del precio internacional del azúcar, debido a los problemas para recuperar una producción que en el pasado llegó a ser el mayor rubro de ingresos de la isla.
Durante la época de la Unión Soviética, Cuba llegó a recibir hasta 4 mil millones de dólares al año por la exportación de azúcar. En la actualidad, el total no pasa de 650 millones de dólares. Sin embargo, las autoridades del Ministerio del Azúcar, evitan considerar los precios internacionales y competitividad, y adjudican las mayores pérdida del sector al bloqueo que Estados unidos mantiene al comercio con la isla.
Si bien el gobierno de Cuba todavía no ha publicado los resultados de la zafra de este año, esta será la segunda cosecha consecutiva donde la producción se ubicará en los mismos niveles, con la cual Cuba deberá cubir el consumo local que en general oscila en las 700 mil toneladas al año, más un acuerdo con China por una cuota de 400 mil toneladas.
De esta forma, una porción apenas superior al 15 por ciento del total de la zafra, será la única que podrá captar el precio de 23 centavos de dólar por libra (unos 450 gramos), que Cuba salió a firmar por los contratos de distribución para marzo con precios del azúcar sin refinar. El valor actual es de más del doble del año pasado, pero Cuba no dispone de más de 200 o 300 mil toneladas de azúcar negociable en el mercado. Entre 2002 y 2004 Cuba tuvo que reorganizar su sistema de producción de azúcar, pues el precio era de apenas 6 centavos de dólar por libra.
Al respecto, el experto cubano en el mercado de azúcar, Juan Varela, dijo en septiembre pasado en declaraciones a una radio local, que "de las 754 mil hectáreas de que dispone el país para caña, lamentablemente más de 122 mil están vacías".
La situación también ha llevado a una pérdida de empleos y cierre de ingenios azucareros, incluso este año, respecto del anterior, habrá una reducción de un 4 por ciento, de 54 que abrieron el año anterior, sólo 50 abrirán en 2009.