Reguladores financieros y jefes de bancos centrales de todo el mundo, reunidos en Suiza, acordaron obligar a los bancos a aumentar sustancialmente la cantidad de capital seguro que mantienen en reserva, a fin de prevenir otra crisis financiera global.
El presidente del Banco Central europeo, Jean Claude Trichet, dijo que el acuerdo es una contribución sustancial para la estabilidad y el crecimiento financiero a largo plazo.
Los bancos tendrían que triplicar la cantidad de activos de alta calidad que actualmente están requeridos a tener en reserva.
La medida daría a los bancos una mayor seguridad frente a inversiones potencialmente riesgosas y aseguraría que tienen suficientes reservas para hacer frente a crisis financieras sin que tengan que recurrir a préstamos de emergencia de los gobiernos, que son financiados con dinero de los contribuyentes.
El plan es llamado “Basilea Tres”, por el nombre de la ciudad suiza donde se reunieron los reguladores.
Las nuevas regulaciones entrarán en vigencia en 2013 y los bancos tendrán hasta seis años para implementarlas en su totalidad.
Los líderes del Grupo de los Veinte darán la aprobación final a la iniciativa, cuando se reúnan en noviembre, en Seúl.