El presidente de EE.UU. dijo que solo quedan dos o tres meses para avanzar el tema en la Cámara de Representantes y junto al senador Reid piden acción a los republicanos quienes continúan oponiéndose
La aprobación de una reforma inmigratoria se ha convertido en un tema pendiente cuando el tiempo se acaba en el Congreso.
El presidente Barack Obama impulsó esta semana una vez más la necesidad de arreglar las leyes migratorias de Estados Unidos, pero al mismo tiempo fijó una ventana de dos o tres meses para que los republicanos actúen.
“La seguridad fronteriza la tomamos muy en serio y este paquete de reformas, también, porque ayudarán a crear un camino justo para aquellos que viven en las sombras, logren la ciudadanía y en consecuencia, hace más fácil el trabajo de los organismos encargados de hacer cumplir la ley a quienes están en el país”, dijo el presidente Obama durante un discurso ante representantes de las organizaciones policíacas del país.
“Indocumentados han vivido con miedo en las últimas 46 semanas”
De igual manera, el líder de la mayoría demócrata en el Senado, Harry Reid, hizo un llamado al ala republicana y enfatizó que “han pasado 321 días y los republicanos que controlan la Cámara de Representantes no han hecho absolutamente nada.
"El sistema de inmigración necesita ser arreglado. No se puede arreglar con piezas legislativas se necesita una reforma comprensiva”, dijo.
Pero por su parte el senador republicano Jeff Sessions aseguró que no cederán a la presión de los demócratas y de los lobistas por una reforma migratoria. "No vamos a aprobar una ley que será mala para Estados Unidos", dijo.
Según Sessions una reforma que legalice a millones de indocumentados originará un serio problema de desempleo. "Esto no es xenofobia, pero es compasivo decir que debemos enfocarnos en los problemas que afectan a los trabajadores estadounidenses", argumentó el senador Jeff Sessions.
Reid también remarcó que los inmigrantes indocumentados han vivido con miedo en las últimas 46 semanas, preocupándose en que ellos tendrían que dejar el país al que llaman su hogar.
“El Senado hizo su trabajo. Por los últimos 10 meses y medio, los niños han perdido a sus padres por acciones del gobierno, todo mientras los republicanos en la Cámara se la han pasado jugando”, declaró Reid.
Reid también se dirigió directamente a los republicanos y les pidió que permitan someter a votación una ley porque confía en que se cuenta con los votos suficientes para aprobar una reforma al sistema de inmigración.
El presidente Barack Obama impulsó esta semana una vez más la necesidad de arreglar las leyes migratorias de Estados Unidos, pero al mismo tiempo fijó una ventana de dos o tres meses para que los republicanos actúen.
“La seguridad fronteriza la tomamos muy en serio y este paquete de reformas, también, porque ayudarán a crear un camino justo para aquellos que viven en las sombras, logren la ciudadanía y en consecuencia, hace más fácil el trabajo de los organismos encargados de hacer cumplir la ley a quienes están en el país”, dijo el presidente Obama durante un discurso ante representantes de las organizaciones policíacas del país.
“Indocumentados han vivido con miedo en las últimas 46 semanas”
De igual manera, el líder de la mayoría demócrata en el Senado, Harry Reid, hizo un llamado al ala republicana y enfatizó que “han pasado 321 días y los republicanos que controlan la Cámara de Representantes no han hecho absolutamente nada.
"El sistema de inmigración necesita ser arreglado. No se puede arreglar con piezas legislativas se necesita una reforma comprensiva”, dijo.
Pero por su parte el senador republicano Jeff Sessions aseguró que no cederán a la presión de los demócratas y de los lobistas por una reforma migratoria. "No vamos a aprobar una ley que será mala para Estados Unidos", dijo.
Según Sessions una reforma que legalice a millones de indocumentados originará un serio problema de desempleo. "Esto no es xenofobia, pero es compasivo decir que debemos enfocarnos en los problemas que afectan a los trabajadores estadounidenses", argumentó el senador Jeff Sessions.
Reid también remarcó que los inmigrantes indocumentados han vivido con miedo en las últimas 46 semanas, preocupándose en que ellos tendrían que dejar el país al que llaman su hogar.
“El Senado hizo su trabajo. Por los últimos 10 meses y medio, los niños han perdido a sus padres por acciones del gobierno, todo mientras los republicanos en la Cámara se la han pasado jugando”, declaró Reid.
Reid también se dirigió directamente a los republicanos y les pidió que permitan someter a votación una ley porque confía en que se cuenta con los votos suficientes para aprobar una reforma al sistema de inmigración.