El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, recibió por separado este jueves en la Casa Blanca a sus homólogos de Chile y de República Dominicana, Gabriel Boric y Luis Abinader, respectivamente, para conversar sobre "asuntos difíciles" de la actualidad, como la situación en Haití o la seguridad en la región.
A su llegada a la residencia presidencial, Boric adelantó su intención de abordar "asuntos difíciles" y de la necesidad de encararlos mediante la promoción de los derechos humanos. Cuando después de sus comentarios se le preguntó si planeaba plantear sus preocupaciones sobre Israel durante la reunión, el chileno asintió.
Biden enfrenta una presión cada vez mayor en el extranjero y en casa por no haber pedido un alto el fuego en el conflicto entre Israel y Hamás, aunque la Casa Blanca ahora respalda una serie de pausas en los combates para permitir que la gente salga de Gaza y que ingrese ayuda.
Boric y Biden compartieron algunos momentos de distensión al inicio de la cita, comentando experiencias sobre haber sido elegidos para cargos cuando tenían 20 años.
"El único problema que tengo contigo es que eres demasiado joven", le dijo Biden a Boric, que tiene 37 años. "Eso no es un problema", respondió Boric.
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La cuestión de Haití
La conversación con Abinader se enfocó en gran medida en la situación de seguridad, dijo el jueves a periodistas el portavoz de seguridad nacional de la Casa Blanca, John Kirby.
Haití vive un ascendente ambiente de inseguridad desde el verano de 2021 cuando comandos armados asesinaron al presidente haitiano Jovenel Moïse en su residencia de Puerto Príncipe. Desde entonces no se han realizado elecciones y el mandatario interino, Ariel Henry, ha reiterado que la violencia impide la celebración de comicios generales.
La oficina de la ONU en Haití ha denunciado que las bandas usan la violación sexual y los crímenes violentos como armas para intimidar a la población. La situación llevó al Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas a aprobar en octubre una misión de seguridad para hacer frente al avance de las pandillas en Haití.
La recepción de ambos líderes se produce en momentos en que varios mandatarios de la región se dan cita en Washington para una cumbre de Líderes de la Alianza de las Américas para la Prosperidad Económica, impulsada por la Administración Biden para crear "un marco para la cooperación hemisférica para fomentar la competitividad regional, la resiliencia, la prosperidad e inversión inclusiva y sostenible" en el continente.
[Parte del reporte procede de Reuters[