El presidente Joe Biden dijo la semana pasada que Estados Unidos nunca había pedido a sus militares que hicieran tantas cosas diferentes en tantos lugares diferentes al mismo tiempo.
“En este momento, los soldados estadounidenses están apoyando a los valientes ucranianos en su lucha por la libertad. Nuestros soldados trabajan día y noche para mantener las municiones y el equipo en movimiento por tierra, mar y aire”.
Esos compromisos incluyen el Oriente Medio, dijo Biden:
“La Fuerza Aérea de Estados Unidos ha distribuido alimentos desde el aire y ha entregado decenas de miles de comidas a la población de Gaza. Ante el reciente ataque sin precedentes de Irán contra Israel, reunimos a nuestros aliados, incluidas las naciones árabes, para repeler el ataque sostenido".
Por su parte, Donald Trump dice que Biden está llevando al ejército estadounidense a una “situación increíblemente peligrosa”.
“Nuestro país ha sido totalmente humillado. Y tenemos un presidente corrupto y comprometido, el corrupto Joe Biden, que nos está arrastrando a la Tercera Guerra Mundial.”
Trump dice que Biden no debería arriesgarse a una guerra con Rusia o China. En su campaña, prometió poner a la fuerza armada estadounidense en función de una política exterior que anteponga los intereses de Estados Unidos.
Trump dijo:
“Pediré a Europa que nos reembolse el costo de reconstruir las reservas enviadas a Ucrania.”
Al mismo tiempo, Biden dice que la fuerza armada está fortaleciendo alianzas e invirtiendo en disuasión.
“Defender nuestros valores enfrentándonos a los tiranos y salvaguardando la paz, pero protegiendo la libertad y la transparencia.”
Sin embargo, hay un problema con el reclutamiento de los militares: según el Pentágono, el año fiscal 2023 no alcanzó los objetivos de más de 40.000 reclutas.
Trump dice que eso se debe a que muchas personas no quieren servir a Biden:
“Restauraré la cultura orgullosa y las tradiciones honradas de las fuerzas armadas de Estados Unidos.”