Estados Unidos y Bolivia intentan de nuevo normalizar sus relaciones diplomáticas tras siete años de distanciamiento por la expulsión recíproca de sus embajadores.
El esfuerzo de normalización ocurre días después de la histórica Cumbre de la Américas que fue testigo del acercamiento entre EE.UU. y Cuba.
El encargado de negocios estadounidense en La Paz, Peter Brennan, se reunió con el canciller David Choquehuanca para conversar sobre los pasos a seguir.
"Nosotros queremos mejorar la relación con Bolivia. Entonces, hablamos un poco de cómo podemos hacer esto y los pasos que podemos tomar; las áreas que vamos a seguir, áreas específicas en las cuales se puede trabajar, áreas que son de interés mutuo”, dijo Brennan al salir del encuentro que se desarrolló en la Cancillería.
"De nuestra parte hay un gran deseo de mejorar la relación y vamos a seguir trabajando en esto, espero que el gobierno de Bolivia, el presidente Morales tenga este mismo deseo, en eso vamos a estar trabajando", señaló Brennan.
El presidente boliviano Evo Morales ha sido un fuerte crítico de Estados Unidos desde su llegada al poder en 2006. Fue él quien ordenó la expulsión del embajador estadounidense, Philip Goldberg, a quien acusó de apoyar un supuesto complot contra él, y tiempo después, a la agencia antidrogas, DEA.
Choquehuanca reveló en diciembre pasado que La Paz propuso a Washington un encuentro cumbre entre los presidentes Evo Morales y Barack Obama para encaminar las relaciones bilaterales.