Malvinas y otros asuntos en la cumbre de la OEA

La soberanía de las islas Malvinas estará en debate en el seno de la OEA.

El tema de Malvinas fue una de las principales fuentes de desacuerdo en la pasada Cumbre de las Américas celebrada recientemente en Colombia.
Pese a que el tema principal y el título oficial de la asamblea es "Seguridad alimentaria y soberanía", el contencioso de las islas Malvinas o Falkland para los británicos, entre otros asuntos espinosos, estarán muy presentes en las discusiones de los cancilleres de la región.

El secretario general de la organización José Miguel Inzulza, ha asegurado que se espera llegar a un acuerdo al respecto de este asunto. Inzulza recordó que que en otros años la asamblea ha emitido declaraciones instando al diálogo entre ambos países.

Sin embargo este punto fue una de las principales fuentes de desacuerdo en la pasada Cumbre de las Américas celebrada recientemente en Colombia.

Según el dirigente el desacuerdo se debió a que muchos países preferían no elevar el asunto a la discusión entre presidentes, y dejarlo al nivel de los cancilleres, que se reúnen ahora en Cochabamba. "Espero que haya un acuerdo en la Asamblea, pero no puedo prejuzgar cuál va a ser la opinión d elos cancilleres".

Por otra parte, Inzulza aseguró que la ausencia de Clinton, se debe a "problemas de agenda". Al contrario que Insulza, el lunes 28 de mayo Evo Morales aseguró que Clinton faltará a la cita porque no está contenta con la agenda de la cumbre.

Morales, también aprovechará la cita para impulsar su agenda a favor de la legalización del consumo de la hoja de coca.

Seguridad alimentaria

‘Seguridad alimentaria y soberanía’, son los principales temas que se planean tratar en los debates en la XLII versión de la Asamblea General de la Organización de los Estados Americanos (OEA), que se celebrará en Cochabamba, Bolivia, del 3 al 5 de junio de 2012.

Los más recientes estudios señalan que la malnutrición y el hambre crónica subsisten en las Américas debido a la confluencia de problemas que conducen a una crisis simultánea en materia de energía, finanzas, clima y alimentos.

En 2011, aproximadamente 52,5 millones de personas en Latinoamérica y el Caribe pasaron hambre, cifra equivalente al 9% de la población total del continente.

Los efectos de la inflación en los precios de los alimentos y su persistente volatilidad ponen en riesgo muchos de los avances logrados en esta materia, e incrementan el riesgo de que se extienda la pobreza y se reduzca el acceso a una nutrición adecuada entre los grupos más vulnerables.

Por eso, los cancilleres de América se reunirán para buscar formas de proporcionar a sus ciudadanos acceso a una alimentación abundante, segura y nutritiva, y reconocer el derecho de cada país a definir sus propias políticas y estrategias para garantizar el derecho a la alimentación de su población y así erradicar el hambre.

Según el embajador de Bolivia ante la OEA, Diego Pary, su país sugirió enfocar la Asamblea en la seguridad alimentaria, tras un amplio debate con la sociedad civil, donde se manifestó la preocupación por la crisis alimenticia que padecen algunos pueblos bolivianos y demás problemas que aquejan a regiones del continente.

Por su parte, el secretario general de la OEA, José Miguel Insulza, aseguró que "para avanzar hacia un orden alimentario más justo, equitativo e inclusivo, necesitamos impulsar y fortalecer políticas públicas orientadas a promover el aumento de inversión en la agricultura, fortalecer los mercados agrícolas, integrar los mercados de pequeños productores, promover el comercio justo, controlar la volatilidad en los precios de los alimentos y desarrollar más programas de acceso a alimentos para las poblaciones vulnerables".

En el encuentro, los estados miembros también debatirán, sobre cómo garantizar el derecho a la alimentación adecuada de forma interdependiente con otros derechos sociales; cómo implementar sistemas integrales de protección social de forma coordinada con políticas amplias para la promoción de capacidades y el desarrollo local; y cómo fortalecer los mercados agroalimentarios, la inclusión económica y social desde una perspectiva de desarrollo socialmente sostenible.