Varios presidentes suramericanos se reúnen este jueves en Cochabamba, Bolivia, sin la presencia de Chile, Colombia y Perú, para fijar una posición ante el incidente que involucró al presidente bolivianoen Europa.
El presidente de Bolivia, Evo Morales, declaró que son insuficientes las disculpas después de que su avión fue retenido la víspera en Viena como resultado de que Italia, Francia y Portugal le negaron el paso por su espacio aéreo, y confirmó que el asunto será abordado este jueves por varios mandatarios suramericanos que se han dado cita en la ciudad boliviana de Cochabamba.
Sin embargo la cita se lleva a cabo con las notables ausencicias de los presidentes de Chile, Colombia y Perú, reafirmando las diferencias entre los mandatarios de la región en cuanto a cómo llevar adelate las relaciones a nivel internacional.
Morales dijo que “nuestro pecado, nuestro delito es ser indígena y antiimperialista (…) Lamento mucho que todavía en Europa hay países que son más serviles a las políticas de Estados Unidos”.
El gobierno boliviano confirmó que en la reunión de UNASUR en Cochabamba estarán los presidentes Rafael Correa (Ecuador); Nicolás Maduro (Venezuela); Cristina Fernández (Argentina); José Mujica (Uruguay) y Desi Bouterse (Surinam), "para asistir a un acto de apoyo incondicional" a Bolivia.
“La posición firme que vamos a asumir desde el Estado Plurinacional es hacer respetar ante los organismos internacionales las normas y los tratados internacionales. No basta solo una disculpa de un país (Francia) que no nos permitió cruzar su territorio”, precisó Morales.
El mandatario dijo además que la posición que se fije en Cochabamba “dependerá del debate jurídico, político, pero también del debate desde un punto de vista de los derechos”, y culpó otra vez a EE.UU. de todo lo sucedido.
Morales regresó anoche tarde a Bolivia tras un largo vuelo trasatlántico luego de haber sido retenido 14 horas en el aeropuerto de Viena debido a rumores que resultaron ser falsos según los cuales en su avión presidencial viajaba el excontratista de seguridad Edward Snowden, reclamado por la justicia estadounidense.
En Colombia, el presidente Juan Manuel Santos se solidarizó en su cuenta de Twitter con Morales porque “es inaudito lo que le hicieron” pero pidió evitar que un conflicto de esa naturaleza dé paso a una crisis entre América Latina y la Unión Europea.
Mientras tanto, el gobierno de México lamentó el incidente, y en una declaración dijo que “refrenda su convicción de que deben respetarse los principios de derecho internacional y la buena práctica diplomática entre los Estados, como de la inmunidad de jurisdicción de que goza un Jefe de Estado”.
Sin embargo la cita se lleva a cabo con las notables ausencicias de los presidentes de Chile, Colombia y Perú, reafirmando las diferencias entre los mandatarios de la región en cuanto a cómo llevar adelate las relaciones a nivel internacional.
Morales dijo que “nuestro pecado, nuestro delito es ser indígena y antiimperialista (…) Lamento mucho que todavía en Europa hay países que son más serviles a las políticas de Estados Unidos”.
El gobierno boliviano confirmó que en la reunión de UNASUR en Cochabamba estarán los presidentes Rafael Correa (Ecuador); Nicolás Maduro (Venezuela); Cristina Fernández (Argentina); José Mujica (Uruguay) y Desi Bouterse (Surinam), "para asistir a un acto de apoyo incondicional" a Bolivia.
“La posición firme que vamos a asumir desde el Estado Plurinacional es hacer respetar ante los organismos internacionales las normas y los tratados internacionales. No basta solo una disculpa de un país (Francia) que no nos permitió cruzar su territorio”, precisó Morales.
El mandatario dijo además que la posición que se fije en Cochabamba “dependerá del debate jurídico, político, pero también del debate desde un punto de vista de los derechos”, y culpó otra vez a EE.UU. de todo lo sucedido.
Morales regresó anoche tarde a Bolivia tras un largo vuelo trasatlántico luego de haber sido retenido 14 horas en el aeropuerto de Viena debido a rumores que resultaron ser falsos según los cuales en su avión presidencial viajaba el excontratista de seguridad Edward Snowden, reclamado por la justicia estadounidense.
En Colombia, el presidente Juan Manuel Santos se solidarizó en su cuenta de Twitter con Morales porque “es inaudito lo que le hicieron” pero pidió evitar que un conflicto de esa naturaleza dé paso a una crisis entre América Latina y la Unión Europea.
Mientras tanto, el gobierno de México lamentó el incidente, y en una declaración dijo que “refrenda su convicción de que deben respetarse los principios de derecho internacional y la buena práctica diplomática entre los Estados, como de la inmunidad de jurisdicción de que goza un Jefe de Estado”.