Reino Unido celebrará en diciembre sus primeras elecciones adelantadas en casi un siglo, esto es después de que el primer ministro Boris Johnson lograra finalmente la aprobación parlamentaria a su iniciativa para intentar poner fin al estancamiento sobre el Brexit.
Apenas dos días antes del vencimiento del tercer plazo para el Brexit, fijado para el 31 de octubre, Johnson, quien se comprometió a culminar el proceso para esa fecha, logró que la Cámara de los Comunes aprobara por 438 a 20 votos su plan para acudir de nuevo a las urnas antes de fin de año.
Será difícil anticipar quién triunfará en los primeros comicios que celebra Reino Unido en fechas navideñas desde 1923. El prolongado proceso tiene agotadas e irritadas a grandes masas de votantes, al tiempo que está erosionando lealtades tradicionales en los dos partidos principales, los conservadores de Johnson y los laboristas.
También lea Brexit: Johnson volverá a proponer elecciones anticipadas“Es tiempo de unir al país y cumplir con el Brexit”, dijo Johnson en un encuentro de legisladores de su partido en la noche del martes, poco después de obtener el visto bueno a su adelanto electoral por parte de un Parlamento al que acusa de haber impedido cumplir su promesa de culminar el Brexit.
Johnson, de 55 años, espera lograr una mayoría para sacar adelante el acuerdo de Brexit que forjó este mes con la Unión Europea, mientras que su principal rival, el líder laborista Jeremy Corbyn, apuesta por un gobierno socialista radical y otro referendo sobre la UE.
El resultado electoral será anunciado el viernes 13 de diciembre. Si ningún partido logra una victoria concluyente, el futuro del Brexit volverá a quedar en el aire, con opciones que van desde una tumultuosa salida no pactada a otro referendo que podría terminar por enterrar el proceso de divorcio entero.
Corbyn ve las elecciones como una oportunidad para lograr cambios reales. Considera al laborismo como una alternativa socialista a la desigualdad y las estrechas relaciones con el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dos aspectos que, en su opinión, caracterizan al mandato de Johnson.
“Un gobierno laborista estará de su lado, mientras que los conservadores de Boris Johnson -que creen haber nacido para mandar- solo cuidarán de unos pocos privilegiados”, afirmó Corbyn, de 70 años.
Entre sus promesas destacan la nacionalización de las compañías ferroviarias, de agua y electricidad, así como imponer impuestos a sueldos más altos para financiar servicios públicos.
Cuando Theresa May -predecesora de Johnson- apostó por un adelanto electoral en 2017, perdió su magra mayoría, en un error que impidió finalmente una aprobación parlamentaria de su acuerdo de Brexit y hundió su carrera política.
Los dos partidos principales deberán luchar ahora en al menos tres frentes: entre ellos; ante el Partido del Brexit de Nigel Farage, que busca seducir a los que apoyaron el adiós a la UE; y frente a los Liberales Demócratas, que aspiran a ganar el favor de los opuestos a abandonar el bloque continental.
“Al menos el estancamiento en el Parlamento se ha roto. El Brexit tiene ahora una oportunidad de tener éxito”, dijo Farage.