Brasil tiene 44.000 soldados apostados en la norteña región amazónica que están disponibles para luchar contra los incendios forestales y podría enviar más desde otros lugares del país, dijo el sábado el Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas.
En una conferencia con periodistas, el jefe del Estado Mayor Conjunto, Raul Botelho, y funcionarios de alto rango del gobierno no detallados cuántos soldados participarían y entregaron pocos detalles operativos sobre cómo serían utilizados y dónde.
El presidente Jair Bolsonaro autorizó el apoyo militar para combatir la cifra récord de incendios que actualmente consumen la Amazonia en respuesta a las críticas internacionales en demanda por una mayor protección a la selva tropical más grande del mundo.
Bajo las leyes brasileñas, sin embargo, los estados deben solicitar ayuda para que los soldados sean desplegados.
El ministro de Medio Ambiente, Ricardo Salles, dijo que cuatro de nueve estado brasileños en la Amazonia han pedido ayuda: Pará, Rondônia, Roraima y Tocantíns. Los estados de Mato Grosso y Acre están preparando tales solicitudes.
El sábado, menos de 50 personas serán enviadas desde Brasilia a Porto Velho, en el estado de Rondônia, para apoyar las operaciones. La cifra incluye a 30 bomberos y 18 especialistas en comunicaciones, dijo Botelho en una presentación.
No hay colaboración de EE.UU. aún
Estados Unidos no está entregando apoyo concreto a Brasil para combatir los incendios forestales, a pesar de la amplia oferta de ayuda realizada por el presidente Donald Trump, dijo el sábado el ministro de Defensa de Brasil, Fernando Azevedo.
No ha habido nuevos contactos entre ambos países respecto a los incendios, más allá de la oferta de ayuda que Trump hizo durante una llamada telefónica con el presidente brasileño, Jair Bolsonaro, dijo Azevedo a periodistas en una conferencia de prensa.