Miles de personas se reunieron en la capital de Kósovo, para dedicar una catedral a la Madre Teresa de Calcuta.
La ceremonia fue parte de un año de eventos en toda Europa y el Sur de Asia para recordar el centenario del nacimiento de la religiosa católica albanesa, y tuvo lugar también en el decimotercer aniversario de su fallecimiento, el 5 de septiembre de 1997.
Una procesión de sacerdotes marchó por la principal avenida de Prístina, que estaba también adornada con carteles que anunciaban festividades por el fin del sagrado mes musulmán del Ramadan.
El arzobispo Zef Gashi, representante especial del Vaticano, celebró la primera misa en la catedral que lleva el nombre de la religiosa.
La construcción del templo comenzó en 2007, bajo la presidencia del fallecido presidente Ibrahim Rugova, el líder que encabezó la lucha de Kósovo por la independencia de Serbia.
Además, el servicio postal de Kosovo emitió un sello en honor de la religiosa quien obtuvo el premio Nobel de la Paz en 1979.