La Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) expresó su satisfacción por la creación una nueva unidad de procesamiento de casos de solicitantes de la condición de refugiado en Guatemala.
ACNUR informó en su página de internet, el martes, que la nueva unidad del Departamento de Reconocimiento de Estatus de Refugiado del Instituto Guatemalteco de Migración (IGM), tendrá una capacidad ampliada para recibir, procesar y adjudicar solicitudes de la condición de refugiado en el país.
José Samaniego, director regional de ACNUR para las Américas, dijo que se trata de “un paso crucial en la dirección correcta, que protegerá mejor a los refugiados y garantizará un camino más seguro, humano y eficiente hacia la seguridad”.
Por su parte, el presidente guatemalteco Alejandro Giammattei, expresó que su gobierno está comprometido “en reforzar el sistema de refugio” y señaló que es un reto que “requerirá mucho esfuerzo, tiempo, recursos económicos y responsabilidades compartidas”.
Según el informe de ACNUR, el nuevo departamento contará con psicólogos, trabajadores sociales y abogados para atender las necesidades de los solicitantes de la condición de refugiado y procesar sus solicitudes.
La agencia de la ONU dice que contribuyó al establecimiento de la nueva con tecnología y equipos, y el apoyo de contribuciones financieras del gobierno de los Estados Unidos.
El informe explica que la iniciativa es parte de los compromisos de Guatemala como parte del Marco Regional Integral de Protección y Soluciones (MIRPS), tras varios años de trabajo conjunto orientado a la creación de espacios de protección para los refugiados que llegan al país.
Guatemala forma parte del Triángulo Norte de Centroamérica, junto a El Salvador y Honduras, una región de gran tránsito de migrantes que huyen de sus hogares a causa de la violencia y la falta de oportunidades.
ACNUR dice que en 2020, un total de 487 personas solicitaron la condición de refugiado en Guatemala, un aumento del 85 por ciento con respecto a 2018.