El embajador de Estados Unidos en El Salvador, Ronald Johnson, hizo un recuento sobre el trabajo del gobierno estadounidense en apoyo al gobierno salvadoreño en materia de seguridad nacional y en el combate a la pandemia durante el 2020, en una nota editorial publicada en la cuenta de Twitter de la embajada y replicada en la prensa local.
Johnson expuso que desde un inicio de la pandemia, el gobierno de Estados Unidos “se comprometió a apoyar a El Salvador”. Como parte de la ayuda, entregó una donación de 600 ventiladores que se distribuyeron en diferentes centros hospitalarios del país para salvar vidas.
El diplomático destacó además el trabajo conjunto que ambos países han realizado para reducir los índices de violencia generada por las pandillas, la extorsión y el tráfico de personas. Temas que catalogó como “objetivos compartidos”.
“El crimen violento se encuentra en una baja histórica en El Salvador. La tasa de homicidios ha ido en descenso en los últimos 3 años, y en el último año se ha reducido a la mitad”, citó el funcionario, quien también habló del tema migratorio.
Según Johnson, pese a que la migración irregular desde El Salvador hacia EE. UU. “se ha reducido en un 81% desde el año pasado”, también es importante reconocer cuáles son las causas que la originan, ya que “están profundamente arraigadas”.
Para el embajador, uno de los factores que contribuyen a que se siga dando este fenómeno es “la falta de oportunidades”. Admitió además que cuando se crean alternativas “las personas prefieren buscar oportunidades legales y legítimas para mejorar su futuro”.
También lea EE.UU. asigna fondos adicionales a El Salvador, Guatemala y HondurasEE.UU. ha invertido en El Salvador millones de dólares en educación y desarrollo de otros sectores esenciales con programas que busquen generar las oportunidades necesarias para que los salvadoreños decidan quedarse en su país.
“La solución a largo plazo está en crear las oportunidades económicas que los salvadoreños necesitan aquí en su país. Atraer la inversión extranjera sigue siendo la mejor apuesta para El Salvador y eso significa que el país debe aprovechar sus ventajas competitivas al máximo”, afirmó el embajador.