El candidato hispano a la alcaldía de Chicago, Jesús “Chuy” García hizo campaña de última hora en un esfuerzo por derrotar al actual alcalde y favorito, Rahm Emanuel, exfuncionario en los gobiernos de Bill Clinton y Barack Obama.
Las elecciones de este martes son la conclusión de una campaña muy peleada de seis semanas luego que en primera vuelta, Emanuel no logrará conseguir la mayoría.
García, nacido en Durango, México y radicado en Chicago desde los 10 años de edad, fue concejal, senador estatal y actualmente es uno de los comisionados del condado de Cook, donde se asienta la tercera ciudad más populosa del país, con cerca de 2,8 millones de habitantes.
Su desafiante campaña ha estremecido los cimientos del Partido Demócrata, no solo en Chicago sino a nivel nacional donde él ha logrado tomar la bandera “de la gente trabajadora” que enfrenta el ala más conservadora con “vínculos con el gran capital y los intereses financieros”, que representa Emanuel.
En la primera vuelta en la que participaron cinco candidatos, Emanuel consiguió el 45 % de los votos a pesar de una intensa campaña publicitaria apoyada por un fondo electoral diez veces mayor al de García, que consiguió el 34 % de los votos.
Chuy García destacó que su estrategia para la segunda vuelta movilizó a miles de voluntarios “que harán la diferencia” este martes, tocando puertas y movilizando el voto a través de las redes sociales.
Los voluntarios proceden en su mayoría de sindicatos, que, además, colaboraron con dinero para pagar la campaña publicitaria.
No obstante, las últimas encuestas sobre intención de voto dan el triunfo a Emanuel el con 51,3 % de los sufragios, mientras que García tendría el 33 % y habría un 15,6 % de indecisos.
La asistencia de un gran número de votantes, sin embargo, podría inclinar los resultados a favor de García.