La NASA lanzó la madrugada del domingo una sonda espacial que se acercará más al sol que cualquier nave anterior, anunció la agencia.
La nave resistirá un calor extremo mientras enfoca a través de la corona solar con el objetivo de estudiar la atmósfera exterior del sol que da lugar a los vientos solares.
La Parker Solar Probe, una nave espacial del tamaño de un automóvil pequeño, fue lanzada desde Cabo Cañaveral, Florida, alrededor de las 03:30 horas locales del domingo, en una misión de siete años.
Está programada para volar hacia la corona del sol a 3,8 millones de millas (6,1 millones de km) de la superficie solar, siete veces más cerca que cualquier otra nave espacial.
La corona da lugar al viento solar, un flujo continuo de partículas que impregnan el sistema solar y pueden causar estragos en la tecnología de comunicaciones en la Tierra. La NASA espera que los hallazgos permitan a los científicos pronosticar los cambios en el entorno espacial de la Tierra.
El proyecto, con un costo de 1.500 millones de dólares, es la primera misión importante bajo el programa Living With a Star de la NASA.
La sonda, nombrada así por el astrofísico solar estadounidense Eugene Newman Parker, tendrá que sobrevivir condiciones difíciles de calor y radiación.
Ha sido equipada con un escudo térmico para mantener sus instrumentos a una temperatura tolerable de 29 grados Celsius incluso cuando la nave espacial enfrenta temperaturas que alcanzan los 1.370 grados Celsius cuando está más cerca del sol.