Cuatro días faltan para que los argentinos acudan a las urnas y se vive un ambiente de ‘campaña ausente’ en la que se estima que sean pocos los indecisos ante la amplia victoria que se pronostica que obtendrá, en primera vuelta, la actual mandataria, Cristina Fernández.
El próximo domingo 23 de octubre, entre las 8 y las 18 (hora local de Argentina), la población debe elegir al futuro presidente, vicepresidente y 130 diputados nacionales en todo el país. Además se elegirán 24 senadores nacionales en ocho provincias, y gobernadores, intendentes y legisladores en otras nueve provincias.
Fernández cierra hoy su campaña junto a su candidato a vicepresidente y actual ministro de Economía, Amado Boudou.
La presidenta ha invertido $3,5 millones de dólares en la campaña, la más costosa de todas, según anunció el Frente para la Victoria, partido que lidera, que ha empleado $30.000 dólares más que hace cuatro años pese a los cambios en la ley de financiamiento electoral.
Este proceso tiene lugar con la prohibición de la compra de espacios en televisión y radio al margen de la cuota establecida, que en las elecciones previas absorbíeron el 80% del costo total de la campaña.
Sólo en Buenos Aires hay 10,8 millones de electores que este domingo deben asistir a votar, según recordó la Camara Nacional Electoral, reivindicando la obligatoriedad de la participación en los comicios.
El Código Electoral Nacional sanciona con multa a quien dejare de emitir su voto sin poder realizar gestiones o trámites durante un año ante organismos nacionales, provinciales o municipales.
Dentro de dos días se da por finalizado el plazo de las campañas electorales y hace cuatro que está prohibida la publicación de encuestas y sondeos de opinión.
En caso de que el escrutinio definitivo del próximo 7 de noviembre no de cómo resultado un claro ganador, se procederá a una segunda vuelta, que tendría lugar el 20 del onceavo mes.