El Congreso de Estados Unidos aprobó una resolución conjunta exhortando al presidente Donald Trump a que hable contra los grupos que apoyan el racismo, el extremismo, el anti semitismo y la supremacía blanca.
La Cámara de Representantes aprobó la resolución el martes, un día después que el Senado le dio su aprobación. La medida va ahora al presidente Trump, quien fue criticado por su respuesta a la violencia en una manifestación de supremacistas blancos el mes pasado en Charlottesville, Virginia.
El senador demócrata por Virginia Mark Warner presentó la resolución junto con un grupo bipartidista de copatrocinadores, los demócratas Tim Kaine y Richard Blumenthal, y los republicanos Cory Gardner, Johnny Isakson y Lisa Murkowski.
La resolución cita la manifestación del 11 de agosto dice la resolución “por parte de cientos de nacionalistas blancos, supremacistas blancos, intergrantes del Ku Klux Klan y neo nazis que entonaba cánticos racistas y eslóganes anti semitas” se enfrentó violentamente con contra manifestantes.
Al día siguiente, un presunto neo nazi atropelló con su automóvil a un grupo de contra manifestantes en el centro de Charlottesville, matando a Heather Heyer e hiriendo a otras 19 personas. También murieron dos oficiales de policía estatal es día al estrellarse un helicóptero mientras monitorean la manifestación.
El Congreso condenó el asesinato de Heyer como un “ataque de terrorismo doméstico”.
La resolución dice que el Congreso “rechaza el nacionalismo blanco, la supremacía blanca y el neo nacismo como odiosas expresiones de intolerancia que son contradictorias con los valores que definen al pueblo de Estados Unidos”.
Pide a la administración Trump que use todas las herramientas disponibles para enfrentar el creciente número de esos grupos en el país, que investigue todos los actos de intimidación y terrorismo doméstico por parte de ellos y que prevenga futuros hechos de violencia.
Trump originalmente culpó de la violencia en Charlottesville a “muchas partes”, pero días después condenó a los neo nazis, supremacistas blancos y el Ku Klux Klan por su rol en la manifestación. Después volvió a decir que “hay culpa en ambas partes”.