El primer ministro de Corea del Sur culmina en Uruguay una gira que incluyó también a Brasil y Paraguay.
Uruguay tiene sumo interés en estrechar los vínculos comerciales y políticos con Corea del Sur y así se lo hizo saber el presidente José Mujica al primer ministro surcoreano, Kim Hwank Sik.
Ambos jerarcas mantuvieron una reunión privada en la residencia oficial de campo de la presidencia de Uruguay, ubicada a unos 170 kilómetros al oeste de Montevideo y no trascendió si hablaron del conflicto que Corea del Sur mantiene con su vecina Corea del Norte.
Sin embargo el canciller Luis Almagro dijo a la prensa que “Uruguay ha tenido una política exterior muy pro Corea del Sur”.
El canciller uruguayo comentó algunos de los temas que estuvieron en la agenda del encuentro. “Se abordaron los principales temas de la agenda comercial bilateral así como los temas de inversiones y fundamentalmente otros sobre la agenda de cooperación de los dos países” explicó el canciller Almagro.
El primer ministro Kim Hwank Sik reiteró el interés de su país de concretar un Tratado de Libre Comercio con el Mercado Común del Sur (MERCOSUR.)
Al respecto, Uruguay dará su apoyo a la inicativa, dijo el canciller, “el presidente le reafirmó el compromiso político de darle un impulso especial a la posibilidad de esta negociación durante la presidencia protempore de Uruguay”.
El presidente Mujica, manejó un auto y llevó de acompañante por la hacienda presidencial al visitante coreano con quien compartió un almuerzo en base a carne bovina, un producto que Uruguay quiere vender a Corea del Sur.
La carne que se sirvió tenía un código de barras con la información del animal, el establecimiento y el productor que lo crió, datos que eran mostrados en una pantalla gigante. Es lo que se conoce como la trazabilidad del ganado.
El ministro de Ganadería, Tabaré Aguerre, señaló que el gobierno tiene expectativas de que Corea del Sur abra su mercado a la carne uruguaya. “Confiamos que eso se va a dar próximamente. Nos pareció estratégica esta visita”, afirmó.
Antes de su partida, el primer ministro surcoreano visitará al balneario Punta del Este y luego partirá rumbo a Europa.