El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, recibirá el mes que viene la visita del nuevo líder de Corea del Sur, Moon Jae-in, en medio de las preocupaciones por los progresos de Corea del Norte en la creación de un arsenal nuclear y de misiles, según dijo el martes la oficina de presidencia de Seúl.
Los mandatarios acordaron reunirse en la Casa Blanca a finales de junio tras un encuentro en Seúl entre Chung Eui-yong, asesor de Moon en política exterior, y Matt Pottinger, director del Consejo de Seguridad Nacional de Estados Unidos para el este de Asia, indicó Yoon Young-chan, portavoz de Moon.
La noticia llegó días después de que Pyongyang probara con éxito un potente nuevo misil que según los analistas podría llegar a Alaska tras perfeccionarse.
En su reunión, Chung y Pottinger reafirmaron que Seúl y Washington comparten el objetivo común de que Corea del Norte no tenga armas nucleares y emplearán “todos los métodos, incluyendo sanciones y diálogo” para alcanzarlo. Los aliados acordaron que el diálogo con Corea del Norte podría darse bajo las “condiciones adecuadas”, dijo Yoon.
La fecha y otros detalles sobre la cumbre aún están por decidir, dijo Yoon. “Prepararemos la reunión para que pueda servir como una oportunidad para que los dos líderes desarrollen su relación y amistad personal”.
El presidente progresista Moon Jae-in está a favor de una estrategia más cordial hacia Corea del Norte que sus predecesores, y se ha ofrecido a visitar Pyongyang si las circunstancias son las adecuadas.
Pero Washington es el aliado más cercano de Seúl y su protector militar, y las crecientes pruebas nucleares y de misiles de Pyongyang hacen crucial una estrecha coordinación.