El gobierno de México reportó el domingo una tendencia a la baja con 3.886 nuevos casos confirmados de coronavirus, con lo que el total se elevó a 730.317, sin embargo la principal autoridad de salud advirtió que las cifras reales de muertos no estarán disponibles en dos años.
Cifras oficiales registraron el domingo 187 nuevos fallecimientos relacionados con COVID-19, con lo que el número de víctimas fatales subió a 76.430.
"Volvimos a abrir con otro descenso", dijo el director general de Epidemiología, José Luis Alomía, respecto a las cifras con las que arranca una nueva semana de reportes sobre el comportamiento de la pandemia en México.
México se mantiene en el cuarto lugar en número de decesos vinculados a COVID-19 en el mundo. La lista la encabeza Estados Unidos, vecino y socio comercial de la nación latinoamericana.
El subsecretario de Salud, Hugo López-Gatell, aseguró el domingo que habrá que esperar para saber la cifra definitiva de fallecidos a causa del nuevo coronavirus, lo que podría revivir el debate local sobre el tema.
"¿Cuándo va a estar lista la estadística final de defunciones de COVID-19? Seguramente un par de años después de este primer año de la epidemia”, dijo López-Gatell, añadiendo que ese trabajo se dejará al instituto de estadísticas del país.
Las autoridades del país han reconocido en el pasado que la cifra oficial es significativamente menor a la real porque incluye solamente a los que murieron después de dar positivo en las pruebas de detección, casi siempre en un hospital. El gobierno mexicano ha evitado incluir en el conteo oficial a las personas que murieron en casa o que no se hicieron una prueba.