El Tribunal de Distrito de Tokio dijo el viernes que extendió el período de detención de Carlos Ghosn por ocho días, dando a los fiscales hasta el 22 de abril para decidir el destino del exjefe de Nissan.
Después de esa fecha, el expresidente de Renault-Nissan, de 65 años, podrá ser inculpado y permanecer en prisión a la espera de su juicio, ser detenido de nuevo por otro motivo o liberado sin cargos.
Fue arrestado por última vez el 4 de abril en su domicilio de Tokio, apenas un mes de su liberación bajo fianza. Se encuentra en la prisión de Kosuge, al norte de la capital, donde los investigadores de la oficina de la fiscalía le interrogan con regularidad.
Está acusado de falsificar reportes financieros y abuso de confianza.
El arresto la pasada semana fue bajo la sospecha de que había tratado de enriquecerse a expensas de Nissan por un total de 5 millones de dólares.
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Ghosn ha negado todas las acusaciones en su contra.
El equipo de defensa de Ghosn lanzó una feroz batalla contra los fiscales de Tokio, calificando el último arresto de "ilegal", de acuerdo a documentos a los que Reuters tuvo acceso.
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Ghosn fue destituido como presidente de Nissan, Renault SA y Mitsubishi Motors Corp tras su arresto, lo que ha puesto en peligro la alianza entre las fabricantes de automóviles.