A pesar del amplio despliegue de efectivos de la policía en los últimos días, el gobierno boliviano ha sido duramente criticado por la oposición y una parte del oficialismo por la demora en la captura de un poderoso narcotraficante uruguayo acusado de ser el autor intelectual del asesinato de un fiscal paraguayo ocurrido el año pasado en Colombia.
Sebastián Enrique Marset Cabrera es buscado por más de 2.500 policías desde el sábado después de que su seguridad sometió a tres policías y escapó. Mientras la policía boliviana coordinan tareas con sus pares de Uruguay, Brasil y Paraguay, el viceministro de Régimen del Interior, Jhony Aguilera, informó el miércoles a la televisora Unitel que "hay un grupo armado que lo protege”.
Las críticas no se hicieron esperar e incluso el partido de gobierno, que se encuentra dividido, cuestionó a la gestión del presidente Luis Arce.
El exministro de Gobierno Carlos Romero, de la facción del oficialismo que encabeza el exmandatario Evo Morales (2006-2019), expresó a radio Panamericana que Bolivia ha dejado escapar a este “pez gordo”. “Los indicios señalan que el señor (Marset) fue protegido”, agregó.
El uruguayo -con más de tres identidades falsas incluida una cédula boliviana otorgada en 2019-, llegó a Bolivia en 2018 y ha salido e ingresado varias veces del país. Se estableció en Santa Cruz, en la región más prospera de Bolivia, donde posee casas lujosas y era miembro de un equipo de fútbol.
“Se ha burlado la inteligencia de los servicios de seguridad de Bolivia”, expresó recientemente el presidente del Senado, Andrónico Rodríguez, cercano a Morales.
También lea Intensa búsqueda en Bolivia de narcotraficante uruguayo prófugoMarset, de 31 años, es considerado líder del Primer Cártel Uruguayo (PCU) con conexiones en Paraguay, donde vivió. Es prófugo de la justicia en su país y en Paraguay y está acusado de enviar cocaína a Europa. El fiscal paraguayo Marcelo Pecci investigaba a la organización criminal de Marset cuando fue asesinado en mayo del año pasado en Colombia, donde pasaba su luna de miel.
Desde la oposición Fabiola Guachalla, de la fuerza Creemos, mencionó que Bolivia está quedando como un país que “tiene vínculos con el narcotráfico”.
En tanto, el ministro de Gobierno Eduardo del Castillo aseguró que en la reunión del bloque Mercosur celebraba en junio en Argentina tuvo un encuentro con su similar de Uruguay, quien le informó que “hay un uruguayo probablemente” en Santa Cruz que era buscado por el gobierno de Paraguay.
En Bolivia Marset está acusado de al menos 10 delitos, entre ellos secuestro, robo agravado, lesiones graves y leves, organización criminal, asociación delictuosa, atentando contra los miembros de organismos de seguridad del Estado y tráfico ilícito de armas.
El presidente uruguayo Luis Lacalle Pou explicó a la prensa de su país que Paraguay ha hecho su requerimiento y que “hace un tiempo que se tenía el dato de que estaba en Bolivia”.
Marset es buscado por Interpol. “Este pedido está activo”, señaló la víspera el jefe de Interpol Paraguay, Carlos Duré.