La Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional (CCDHR) denunció en La Habana que durante los últimos cinco fines de semana el gobierno de la isla ha llevado a cabo violentas acciones de represión política contra mujeres y otros disidentes pacíficos en varias partes del país.
"Por lo menos 65 hombres y mujeres fueron detenidos por la policía política secreta y la mayoría de esas personas, completamente desarmadas, sufrieron diversos actos de brutalidad policial", según dijo en un comunicado Elizardo Sánchez, portavoz de la CCDHR, quien agregó que se desconoce el paradero de 29 de ellos.
Esta semana la organización defensora de los derechos humanos Amnistía Internacional (AI) informó que el último mes, esposas y familiares de presos políticos conocidas como las Damas de Blanco están siendo hostigadas y agredidas de forma extrema.
“Han sido víctimas de detención arbitraria y agresiones físicas a manos de miembros de las fuerzas de seguridad” y de turbas instigadas por el gobierno en la ciudad de Santiago de Cuba, en el oriente de la isla, y en otras localidades, según la denuncia de AI.
Hace una semana, en un hecho que va dejando de ser inusual en Cuba, cuatro mujeres se manifestaron contra el gobierno a la luz pública en la escalinata de la Universidad de La Habana, en pleno corazón de la capital y fueron rápidamente detenidas por la policía en medio de abucheos de una multitud que gritó “abusadores” a los agentes.
Sólo dos días después, otras dos mujeres protagonizaron una protesta en un céntrico mercado de La Habana y cuando se las llevaban presas los policías fueron rodeados por decenas de personas que a voz en cuello demandaron “libertad”.
Tales hechos ocurren en momentos en que algunos periodistas se preguntan si las revueltas populares que han estremecido a países árabes con regímenes autocráticos, podrían tener alguna repercusión en la isla.
En una entrevista publicada el lunes por el diario El Mundo, el reconocido cantautor español Joaquín Sabina, un viejo y ferviente admirador de la revolución cubana, declaró estar a la espera de que en Cuba surja un 15-M --como se le conoce al Movimiento de los Indignados en España--, y “que la gente salga a la calle y diga que es lo que no le gusta”.
En una sorpresiva carta abierta difundida el martes por el diario de Miami El Nuevo Herald, el mundialmente afamado cantautor cubano Pablo Milanés, históricamente identificado con el gobierno de la isla, dijo sentirse “avergonzado” e “indignado” por la violencia que sufren las Damas de Blanco en Cuba, y se solidarizó con ellas “en su dolor”.
Milanés también criticó en la carta la autocensura de los periodistas y el silencio cómplice de los intelectuales que residen la isla. Previamente, a propósito del concierto que dio el sábado pasado en Miami, en declaraciones a la prensa de esta ciudad, el cantautor admitió que seguía defendiendo el socialismo pero dijo que ya no era “fidelista”.