Los terrenos inaccesibles, los fuertes vientos y las condiciones extremadamente secas hacen difícil el trabajo de los bomberos.
Un gigantesco incendio forestal en California, se está escapando de control y amenaza uno de los más reconocidos y mundialmente famosos de los parques nacionales de Estados Unidos como es el de Yosemite.
Las autoridades informaron este lunes que el incendio ya ha consumido más de 60.000 hectáreas, y afecta parte del Parque Nacional Yosemite, en la parte central de California.
Hasta el momento los bomberos han logrado contener apenas un15% del incendio. Algunos residentes que viven en las áreas donde el fuego avanza, como el hispano Claudio Alecio, tuvieron que actuar con rapidez para escapar.
Entre las acciones desplegadas se incluye el desmatado, cortando los arbustos que pueden servir de combustible a las llamas, así como la colocación de aspersores de agua para tratar de evitar que el incendio alcance las emblemáticas secuoyas gigantes del parque, que conforman parte de la flora más antigua de la Tierra.
El incendio en Yosemite es uno de los casi 50 grandes incendios forestales activos en el árido oeste de Estados Unidos, donde la falta de nevadas intensas durante el invierno y las escasas precipitaciones de este año han causado condiciones extremadamente secas.
Más de 3.400 bomberos están luchando contra las llamas que avanzan alimentadas por vientos de 80 kilómetros por hora.
Los terrenos inaccesibles, los fuertes vientos y las condiciones extremadamente secas hacían difícil el trabajo de los bomberos que tratan de contener el incendio que comenzó hace casi 10 días.
Más de 12 helicópteros y media docena de aviones tanqueros lanzan agua y retardante desde el aire.
El servicio forestal de Estados Unidos dice que unas 4.500 casas están amenazadas por el incendio.
Las autoridades informaron este lunes que el incendio ya ha consumido más de 60.000 hectáreas, y afecta parte del Parque Nacional Yosemite, en la parte central de California.
Hasta el momento los bomberos han logrado contener apenas un15% del incendio. Algunos residentes que viven en las áreas donde el fuego avanza, como el hispano Claudio Alecio, tuvieron que actuar con rapidez para escapar.
Entre las acciones desplegadas se incluye el desmatado, cortando los arbustos que pueden servir de combustible a las llamas, así como la colocación de aspersores de agua para tratar de evitar que el incendio alcance las emblemáticas secuoyas gigantes del parque, que conforman parte de la flora más antigua de la Tierra.
El incendio en Yosemite es uno de los casi 50 grandes incendios forestales activos en el árido oeste de Estados Unidos, donde la falta de nevadas intensas durante el invierno y las escasas precipitaciones de este año han causado condiciones extremadamente secas.
Más de 3.400 bomberos están luchando contra las llamas que avanzan alimentadas por vientos de 80 kilómetros por hora.
Los terrenos inaccesibles, los fuertes vientos y las condiciones extremadamente secas hacían difícil el trabajo de los bomberos que tratan de contener el incendio que comenzó hace casi 10 días.
Más de 12 helicópteros y media docena de aviones tanqueros lanzan agua y retardante desde el aire.
El servicio forestal de Estados Unidos dice que unas 4.500 casas están amenazadas por el incendio.