La Cámara de Representantes de EEUU votó el miércoles para acusar al fiscal general, Merrick Garland, de desacato al Congreso por negarse a entregar el audio de la entrevista del presidente Joe Biden, la última y más fuerte reprimenda de los republicanos al Departamento de Justicia en plena campaña presidencial.
La votación de 216-207 se produjo en línea con el partido, y los republicanos se unieron detrás del esfuerzo de desacato a pesar de las reservas entre algunos de los miembros más centristas del partido. Sólo un republicano, el representante David Joyce de Ohio, votó en contra.
Garland dijo en un comunicado el miércoles por la noche: “Es profundamente decepcionante que esta Cámara de Representantes haya convertido una autoridad seria del Congreso en un arma partidista. La votación de hoy ignora la separación constitucional de poderes, la necesidad del Departamento de Justicia de proteger sus investigaciones y la cantidad sustancial de información que hemos proporcionado a los Comités".
Los republicanos han denunciado los casos penales contra el expresidente Donald Trump, su virtual candidato presidencial, al tiempo que han ofrecido amplias aseveraciones contra lo que consideran la corrupción en la administración del presidente Biden.
También lea Los documentos clasificados de Biden y Trump: ¿En qué se diferencian?Los republicanos se encolerizaron cuando el fiscal especial Robert Hur rechazó procesar a Biden por su manejo de documentos clasificados y rápidamente iniciaron una investigación. Legisladores republicanos —encabezados por los representantes Jim Jordan y James Comer— enviaron una citación para el audio de las entrevistas de Hur con Biden en la primavera. El Departamento de Justicia entregó algunos documentos, pero no el audio de la entrevista con el mandatario.
Si prospera la moción para condenar a Garland, será el tercer secretario de Justicia en ser declarado en desobediencia del Congreso en la historia estadounidense. Pero es poco probable que el Departamento de Justicia —del cual Garland está a cargo— lo procese. La decisión de la Casa Blanca de invocar privilegio ejecutivo sobre el audio, impidiendo su difusión al Congreso, hace sumamente difícil presentar un caso penal contra Garland.
La Casa Blanca ha condenado repetidamente a los republicanos por tratar de declarar en desacato a Garland, y ha desestimado los esfuerzos por obtener el audio como puramente políticos.
Garland ha defendido al Departamento de Justicia, diciendo que los funcionarios han hecho enormes esfuerzos por dar información a las comisiones legislativas sobre la investigación de Hur, incluyendo la transcripción de la entrevista con Biden.
“Ha habido una serie de ataques sin precedente y, francamente, infundados contra el Departamento de Justicia”, dijo Garland en una conferencia de prensa el mes pasado. “Esta solicitud, este esfuerzo por usar una declaración de desacato como método para obtener archivos sensibles nuestros es solo el más reciente”.
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